Las escuderías Mercedes y Ferrari no quieren ceder en lo más mínimo. Ambos están disputando cabeza a cabeza los campeonatos de pilotos y constructores de la temporada 2018, razón suficiente para actualizar sus motores. Desde este fin de semana en el exigente Spa-Francorchamps, sus pilotos gozarán de este beneficio.

En el caso de Mercedes, el británico Lewis Hamilton tendrá un nuevo motor de combustión interna (ICE), turbocargador, MGU-H y MGU-K. No tendrá penalización ya que se encuentra en el rango de cambios para la temporada. Situación diferente afronta su compañero de equipo, el finlandés Valtteri Bottas, quien tendrá una nueva unidad de potencia, cambiando los seis elementos, excediendo el rango en varios. Por esta razón partirá en la última posición en la carrera del domingo.

Force India y Williams, equipos clientes de Mercedes, también recibirán estas actualizaciones. En el caso de Sergio Pérez, lo único que no ha modificado es la batería.

En el caso de Ferrari, Sebastian Vettel y Kimi Räikkönen tienen nuevos motores de combustión interna. El alemán también cuenta con un nuevo turbocargador y MGU-H. Evitando una penalización para Kimi, Ferrari no cambió su turbo.

En cuanto a los equipos clientes de Ferrari - Haas y Sauber -, las actualizaciones las recibieron en el pasado GP de Hungría.